Dos cráteres en las tierras altas de Islandia: Stútur y Ljótipollur



Antes de abandonar definitivamente la Reserva Natural de Fjallabak (Friðland að Fjallabaki), hacemos dos pequeñas paradas para asomarnos a dos cráteres fabulosos, cada uno en su estilo.

A poco más de 3 Km de Landmannalaugar, en dirección norte, encontramos el primero de ellos, Stútur (boquilla) que está situado en el lado sureste del lago Frostastaðavatn.



Ascendemos sin esfuerzo por las laderas de este pequeño volcán de proporciones perfectas hasta llegar al borde de su colorido cráter.



Las formas del relieve y la variedad de colores configuran un paisaje que parece de ciencia ficción.





Nuestra siguiente parada será Ljótipollur, un cráter bastante más conocido que se encuentra a una distancia de algo más de 5 Km de Stútur, en dirección noreste.

Ljótipollur (charco feo, ¡lo que hay que oír!) es un maar, que forma parte del sistema volcánico del Bárðarbunga. Se originó en una erupción explosiva que tuvo lugar alrededor del año 1477, para llenarse posteriormente de agua.



La subida es muy sencilla, ya que ni la pendiente es pronunciada ni la altura elevada.



De nuevo caminamos con la sensación de que si viéramos de pronto aparecer una nave espacial, nos parecería la cosa más natural del mundo.



Las vistas desde el borde del cráter son una maravilla. Ni siquiera la lluvia, que cae toda de frente, es capaz de estropear la experiencia, aunque por precaución hay que guardar la cámara.



Comentarios